jueves, 20 de enero de 2011

Irrelevancia (Dos copas de nuestro vino).

No sé cómo, pero ha ocurrido. Y una vez que esto pasa, ya no hay vuelta atrás.
Pero en cierto modo tenía que pasar. Este momento llegaría. Y todos estaban esperando a que ocurriera para que aplaudieran como se aplaude al final de una buena película. O se llora cuando algo te traspasa la fibra. O se abraza cuando necesitas que alguien te recuerde que le importas, y que está ahi. Que nunca se ha ido.


...al fin y al cabo, era tras aquel cristal cuando sentíamos que estabamos hechos el uno para el otro, como dos piezas perfectas de un puñetero puzzle de 1000 piezas, pero se te olvida que para enmarcar nuestra historia tenemos aun un centerar de piezas que encajar.

DmN.

1 comentario:

Acariciame el alma...